Para algunos, el mejor, y para otros, un sonero destacado. El puertorriqueño ha llevado uno de los géneros musicales más movidos hacia lugares impensados. Conoce algunas de sus curiosidades aquí.
Dentro del mundo de la salsa, Gilberto Santa Rosa es uno de los artistas más queridos y respetados por la pasión que le entregó a la música desde los 12 años, cuando organizó una agrupación de aficionados para dar sus primeros pasos en lo que luego sería una idolatrada carrera musical.
Su ADN poseía el ritmo y don salsero que muchos nuevos talentos buscan tener. Así, ha llegado a tal punto en el que ‘Caballero de la Salsa’, escenario que pisa , escenario que vibra y siente. Todo esto mediante su serena performance y el estilo inigualable, características que lo condujeron al salón de la fama.
Con 24 años, debutó como solista y director de orquesta con el apoyo de la compañía Combo Récords, del también conocido Rafael Ithier. Desde entonces, comenzó a hacerse un nombre en el mercado internacional y ser llamado a diferentes eventos por diferentes partes del mundo.
Una de las preguntas que invade a sus fanáticos es respecto a por qué muchos lo llaman el ‘Caballero de la salsa’. Si bien, al subirse a los shows, siempre se le ha visto vistiendo un terno, muy elegante y mostrando una gran presencia, pocos saben el verdadero origen de este apodo.
“En la década de los 80, éramos varios los colegas que salimos al ruedo como solistas del género de la salsa. Para la época, existía un programa de radio llamado “En tiempo de salsa”, y su locutor, Rolando Sánchez, fue quien me bautizó como el ‘Caballero de la salsa’, por el tipo de canciones que interpretaba”, le explicó a sus seguidores en 2018 por Facebook.
A ello se sumaron Tito Nieves, Nano Rodríguez, Eddie Santiago y demás amigos, quienes también lo llamaban así porque rompió la vertiente erótica que sostenían algunos colegas que venían haciendo salsa mucho antes que él.
¿Por qué Gilberto Santa Rosa dice “camínalo” en sus presentaciones?
Resulta que el maestro Willie Rosario quería que sus cantantes tenga una frase o palabra que los distinguiese e identifique de los demás artistas. En ese sentido, Gilberto Santa Rosa, en una de sus presentaciones, le dijo a su público: “Grita algo ahí, chico. Camínalo”. Esta frase no estuvo previamente pensada, pero se convirtió en una palabra que hasta hoy lo acompaña en sus conciertos.
FUENTE: LAREPUBLICA